Matienzo es una de las primeras agencias de Córdoba Capital y físicamente está ubicada en un lugar muy particular: un centro de participación comunitaria en el que convive con otros organismos municipales, provinciales y nacionales. Desde allí PAMI brinda atención a más de 25 mil personas afiliadas de la zona.
Erika Cuello es la responsable de liderar este equipo que fue adaptándose a la nueva realidad que impone la pandemia. “Con la ayuda y la colaboración de cada una y cada uno, logramos organizarnos. Entregamos todos los elementos de fisiatría que afiliadas y afiliados esperaban desde hacía más de dos años, otorgamos las credenciales que no habían sido repartidas y, producto de un esfuerzo que sólo se pudo alcanzar en equipo, logramos ponernos al día” -cuenta.
Este cambio de rumbo, sumado a los que inesperadamente surgieron producto del rediseño obligado del trabajo en la agencia, fueron fortaleciendo al equipo, que dado el incremento de casos de COVID-19 en la provincia, actualmente se encuentra trabajando con guardias.
Erika y otra persona designada que va rotando semanalmente, se encuentran de manera presencial y articulan sus tareas con quienes dan soporte desde sus casas. Al respecto, Roger Wannaz –Referente MAP- comenta: “El aprendizaje que deberíamos llevarnos de este momento que estamos viviendo es que no hay que resistirse a los cambios. Durante muchos años se trabajó de una forma y de golpe nos vimos obligados a realizar cambios que vemos son para mejor. Y en este sentido creo que el uso de la tecnología ha tenido un rol sumamente importante”.
“Lo que la pandemia nos dejó”
Los turnos online y la posibilidad de gestionar alrededor del 80% de los trámites que se realizan en la Agencia a través de la web de PAMI, brindó la oportunidad de optimizar la organización hacia el interior del trabajo como mejorar la calidad de la atención que se brinda a las afiliadas y los afiliados. El impulso de las medidas que desde PAMI se fueron implementando para evitar que las personas afiliadas deban acercarse a las agencias o UGLs para realizar algunos de sus trámites, sumado a la permanente tarea que desde las mismas agencias se realiza para promover y acompañar el uso de las tecnologías digitales, optimizó los tiempos de espera, respuesta y de resolución.
“La pandemia vino a quebrar el sostenimiento de formatos que se suelen reproducir sin revisar y, en este sentido, potenciar el manejo de la virtualidad en las personas mayores es uno de los grandes avances alcanzados”, cuenta María Audisio, una de las dos asistentes sociales del equipo de Matienzo.
También se percibe otro cambio importante –y no menor, afirma Erika- en las personas que se están acercando a nuestra Agencia: hoy atendemos a nietas y nietos, hijas e hijos, vecinas y vecinos, “atendemos a la familia”. Y en este contexto, las redes solidarias que se fueron afianzando y fortaleciendo para acompañar a las personas afiliadas se van enraizando y construyendo nuevos vínculos.
La comunicación fluida, la escucha y el trabajo articulado -con centros de jubilados, comedores, médicos prestadores de la comunidad- son esenciales y se convierten en la base sobre la que se construyen las respuestas para acompañar a las personas afiliadas.
“Poder comprometernos y extenderles esa mano que estaban necesitando por ser la población más vulnerable, nos llena de orgullo. No somos un banco privado, somos un servicio esencial para ellas y ellos y por eso merecen nuestro mejor gesto, nuestra mayor empatía, nuestra mayor muestra de amor” agrega Erica.
Matienzo, un gran equipo de Córdoba Capital
Erika Cuello es la Jefa de la Agencia, Roger Wannaz es el referente MAP, Mirta Guanuco, Andrea Otero y Marisa Murdocca brindan soporte administrativo y María Audisio y Ana Deandrea, son las asistentes sociales del equipo. Actualmente, otras tres integrantes de Matienzo se encuentran con licencia médica.
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